Es
el país más grande del mundo y puede que sea uno de los más enigmáticos
para los europeos. Permaneció cerrado a los occidentales durante 70
años, llegando a ser un país casi mítico lleno de leyendas y misterios.
En la actualidad Rusia cada vez se acerca más al proceso europeo, lo que
nos permite descubrir la singular y variada naturaleza del país,
familiarizarnos con el arte y la cultura de muchos siglos, conocer a su
gente abierta y hospitalaria. Se pueden observar claramente los cambios
que transformaron de manera radical la cara del imperio que ocupa la
sexta parte de la tierra.
Lugares de interés:
Moscú, atractiva y seductora, atrae a los visitantes desde lejos con las doradas cúpulas de sus iglesias. La
Plaza Roja es un símbolo de toda Rusia, considerada una de las más bellas de toda Europa.
San Petersburgo, también llamada la Venecia del Norte, es una de las perlas arquitectónicas de los siglos XVIII-XIX.
Gastronomía:

La gastronomía rusa ha sabido mezclar lo mejor de las cocinas orientales
y occidentales, son platos con una mezcla de sabores agridulces
realmente magistral. Entre sus especialidades podemos destacar los
blinis y las tortitas de maíz con arenques y salsa de nata agria, junto
con exquisitas sopas de verduras, y como no el caviar o el salmón o el
esturión.